Libros sin palabras para quienes leen sus primeras letras y textos llenos de tinta para quienes se sienten niños grandes. Páginas de colores, ilustraciones y juegos del lenguaje. Autores mexicanos y extranjeros. En el universo literario hay tantos libros como niños en el planeta. Esta selección de literatura para niños es un helado de tutifruti.
De 5 a 8 años
Luciana la pejesapo, Verónica Murguía (FCE)
Este libro cuenta la historia de Luciana, quien vive en la parte del mar donde la luz del sol no se atreve a acercarse y donde siempre parece que es de noche: en las profundidades. En ese entorno de oscuridad, Luciana recorre cada rincón del mar, guiada por su propia luz. Aunque conoce muy bien el fondo, nunca ha visitado la superficie, hasta que un día, animada por Gorgona —una medusa muy presumida— decide subir para comprobar si, como dice la medusa, el sol brilla más que todos los animales del fondo. En esta historia de la escritora mexicana Verónica Murguía el último rincón del mar se traza con tinta oscura.
Al final de la fila, Marcelo Pimentel (FCE)
Un libro sin palabras diseñado para los lectores de todas las edades. En sus páginas, Marcelo Pimentel nos introduce en un desfile de animales tan diversos como sorprendentes. Todos forman una fila mientras esperan su turno para recibir la magia de la selva. Sin embargo, una lluvia inesperada comienza a caer sobre sus cabezas y el color de todo desaparece. Se trata de un libro circular: termina donde comenzó. Llegar al final y resistir la tentación de comenzar de nuevo es un verdadero reto.
El invitado, Marie Dorléans (Trilce Ediciones)
El protagonista de este libro es un hombre común y corriente que salió a pasear una mañana y se encontró con un caballo. Asombrado, se le ocurre invitarlo a su casa. El animal es muy educado, sabe tomar el té y entretener a las visitas, pero con el tiempo instala y —como si fuera un pensamiento recurrente—ocupa cada vez más espacio hasta invadir totalmente el espacio del hombre que le ofreció su casa. Harto y temeroso, el hombre deberá aprender a convivir con su nuevo inquilino.
De 9 a 11 años
Las aventuras de Buscoso Busquiento, Alma Velasco y Eduardo Casar (Alfagura infantil)
Este libro cuenta, en ocho capítulos, la historia del mejor detective del mundo: Buscoso Busquiento. El detective no fuma pero usa su pipa para hacer pompas de jabón, con las que eleva sus pensamientos para resolver los misterios a los que se enfrenta. Como todo gran detective, Buscoso Busquiento tiene un fiel amigo, Colmillo Valiente, quien posee un extraordinario olfato con el que sigue el camino invisible de los olores. Ambos comparten aventuras llenas de peligro y enigmas que parecen no tener solución.
Momo, Michael Ende (Alfaguara infantil)
Publicada en 1973, este libro cuenta la historia de Momo, una niña huérfana que vive en las ruinas de un anfiteatro en Italia. Momo es capaz de enmendar la tristeza, disminuir el enojo o desaparecer el aburrimiento gracias a su extraordinaria habilidad de saber escuchar. Pero su tranquilidad termina cuando los hombres grises —representantes del Banco del Tiempo— que prometen que ahorrar tiempo, y cobrarlo con intereses, es la clave de la longevidad. Momo se dará cuenta de que, en el futuro, nadie tendrá tiempo ni siquiera para descansar. Con la astucia de un detective, evita caer en la trampa, por lo que se convierte en la única persona capaz de devolver a la gente el tiempo que ha perdido.
De 12 a 14 años
La melancólica muerte de Chico Ostra, Tim Burton (Anagrama)
Como otros cieneastas, Tim Burton ha cambiado la cámara por la pluma. Su libro está formado por 23 cuentos-poema ilustrados por él mismo. Colmado de personajes típicamente burtonianos —niños tóxicos, con cuerpo de paja o con clavos en el lugar de los ojos— esta obra muestra la melancolía, el amor, el humor negro que caracterizan el cine de Burton. La traducción de Anagrama incluye los poemas en sus versiones originales, escritos en inglés. Es, al mismo tiempo, un libro horrible y adorable en el que habita un peligroso equilibrio entre la fantasía y el humor.
El secreto el andén 13, Eva Ibbotson (Salamandra)
En el andén número 13 de la estación King’s Cross hay una colina muy alta. La leyenda cuenta que en este tipo de colinas —llamadas también mogotes— hay puertas que conducen a otros mundos. Pero la colina de King’s Cross sólo se abre nueve días cada nueve años. Cuando esto ocurre, un cíclope, un mago, un hada y una bruja deben emprender la misión de rescatar a un príncipe que fue secuestrado nueve años antes, cuando era un bebé. El único inconveniente es que el pequeño príncipe ya no es un bebé; ahora es un niño insoportable dispuesto a hacer cualquier cosa para que no lo rescaten.
MILENIO CULTURA
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